

Por: ROMINA
En una entrevista, Yáñez reiteró que no organizó la celebración, lo cual estaba prohibido en ese momento, pero asumió la responsabilidad de su participación. "Es algo de lo que me arrepiento profundamente. Quiero pedir disculpas a todos aquellos que no pudieron despedirse de sus seres queridos o que sufrieron durante las largas cuarentenas”, expresó.
Además, ofreció su versión sobre lo sucedido esa noche, explicando que la Casa Rosada había trasladado sus operaciones a Olivos y que las reuniones eran frecuentes. "Era mi cumpleaños, y algunas personas que trabajaban conmigo decidieron quedarse", admitió.
Reconoció que la situación no tiene justificación y calificó lo ocurrido como "un poco excesivo". "Soy consciente de todo lo que se hizo y de lo que vivíamos a diario en el país, así como de las múltiples solicitudes de ayuda de quienes estaban en una mala situación. Yo lo sentía en carne propia", concluyó Yáñez.